La autora bestseller de la saga Medianoche y de Mil lugares donde encontrarte, nos ofrece un viaje interestelar en el que busca responder qué significa ser humano.
Una batalla intergaláctica. Una alianza forzosa. Una pasión imposible.
Noemí Vidal es una joven soldado del planeta Génesis, una antigua colonia de la Tierra sumida en una dura guerra por conseguir su independencia. Tras un ataque sorpresa, Noemí termina perdida en el espacio, vagando en una nave abandonada.
Abandonado también está Abel, uno de los robots más sofisticados del ejército de la Tierra. Un robot que debería ser su enemigo. Sin embargo, su programación lo obliga a obedecer a Noemí y, aunque ello lo lleve a poner su vida en peligro, termina por ayudarla en su propósito de salvar Génesis.
Poco a poco, Noemí se irá dando cuenta de que Abel es mucho más que una máquina, y Abel, por su parte, aprenderá que su devoción por Noemí nada tiene que ver con su software...
FRAGMENTO
“—Ésta es la posición de navegación del piloto, ¿verdad?
Noemí se pasa la mano por el pelo. Están en el puente de mando de la Dédalo. Las paredes curvas permiten que la pantalla de la nave se extienda a su alrededor en un ángulo de casi 360 grados, también por el techo. El firmamento que los rodea se ve con tanto detalle que el puente parece una plataforma metálica suspendida en medio del espacio.
—La silla del capitán está claro cuál es y entiendo que ésta es para las comunicaciones externas. Y ésa es la consola de operaciones.
—Correcto. Tu sofisticación tecnológica resulta sorprendente en un soldado de Génesis.
Noemí lo mira con el ceño fruncido.
—Limitamos la tecnología por propia elección, no por ignorancia.
—Por supuesto, pero con el tiempo lo primero lleva inevitablemente a lo segundo.
—¿Por qué tenes que actuar como si fueras superior?
Abel considera la pregunta.
—Es que soy superior en casi todos los aspectos.
Las manos de Noemí se cierran sobre el respaldo de la silla del capitán, sujetándola con fuerza, y cuando vuelve a hablar, lo hace con los dientes apretados.
—Cállate de una vez.
—La modestia no es uno de mis principales modos operativos —admite—, pero lo intentaré.
Ella suspira.
—Me conformo con eso.
La observa mientras ella recorre todo el puente. El exotraje verde esmeralda dibuja su cuerpo atlético en la oscuridad del espacio que tienen de fondo. Entre las estrellas brillan los planetas del sistema genesiano, grandes y sombreados. Abel reconoce Génesis, de un azul y un verde exultante, con sus dos lunas visibles como dos puntitos de color blanco."
Claudia Gray vive en Nueva York, donde se ha desempeñado como disc-jockey, abogada, periodista y mesera. Le encanta viajar, leer, escuchar música y, sin lugar a dudas, escribir. Es autora de los exitosos libros Medianoche, Adicción, Renacer, Despedida, y Mil lugares donde encontrarte.
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