Los fanáticos podrán disfrutar del final del anime sin interrupciones en los cines con Attack on Titan: El Ataque Final

Antes de adentrarnos en Attack on Titan: El Ataque Final, te platicamos que el 5 de noviembre de 2023, el día que se estrenó el episodio final de Attack on Titan, culminando con uno de los animes más populares en los años recientes, pero también marcando el cierre para los fanáticos para los que esta serie los acompañó durante una larga etapa (pandemia incluída). Este final fue algo peculiar, tanto por sus decisiones narrativas como por el hiatus prolongado que tuvo.
Así, un año después de su lanzamiento, el 8 de noviembre de 2024 se estrenó en Japón El Ataque Final, una recopilación de los dos últimos episodios de la serie para verse en cines, junto a una escena postcréditos. Este fin de semana, El Ataque Final llega a México y varios países de Latinoamérica para los fanáticos que han entregado su corazón a la obra de Hajime Isayama.
En líneas generales, Attack on Titan nos muestra un mundo donde los últimos humanos viven detrás de enormes murallas para protegerse de los titanes: monstruos enormes que devoran a los humanos. Cuando la aparición de dos titanes peculiares destroza por completo el primer frente de la humanidad, el joven Eren jura venganza, determinado a exterminarlos a todos.
El anime cuenta con varias vueltas de tuerca y descubrimientos que la van transformando arco por arco, hasta llegar a su última temporada, donde los personajes se enfrentan a un dilema moral sin solución aparente. Así, Eren decide convertirse en un hombre libre de muros y restricciones, pero el costo será tremendo: exterminar la vida fuera de la muralla. Amigos, compañeros e incluso enemigos unen fuerzas para tratar de detenerlo, incluso si es sólo para morir intentándolo. La Legión de Reconocimiento hace una última misión para cumplir con su deber: detener a quien debía de ser la esperanza de la humanidad.
En honor a la honestidad, hay que admitir que, en lo que respecta al material para cines, verás tal los últimos dos episodios de la serie (los cuales, a su vez, se dividen en cinco capítulos), sólo se le añadió una escena postcréditos. Si buscas novedades, quizás te decepciones y definitivamente te hagas spoilers colosales si no has visto la serie o la dejaste en algún momento. La apuesta de Crunchyroll es arriesgada, ya que en esta ocasión es una película expresamente para los fanáticos. No obstante, se agradece profundamente.
Ver el final de temporada en cines tiene sus ventajas y desventajas. Por un lado, la calidad sonora es excepcional, le hace justicia a la maravillosa banda sonora del anime y cada una de sus canciones. Los momentos en los que la animación es floja, se notan aún más, pero las escenas emotivas también, especialmente el destino de Eren se ve más vívido y se pueden apreciar mejor los detalles.
Este estreno prácticamente invita a revisitar el final, uno de los más controversiales de los animes contemporáneos que ha divido a sus fanáticos tanto como a sus personajes. Personalmente, encontré detales que había pasado por alto la primera ocasión, pero también me hizo conectar tanto con su mensaje (el cual es todavía más válido y urgente que hace dos años) pero también con la parte de mí que se emocionaba con cada capítulo nuevo y esperó con ansias el lanzamiento del final en Crunchyroll.
Ahora bien, se trata de dos especiales pensados originalmente para televisión, por lo que puede que en momentos se sienta pesado, hay demasiada información, momentos intensos y prácticamente pasan años desde el inicio del primer especial y el final del segundo. Además, hay cosas que en momentos pueden volverse reiterativas o cansadas, algunas partes de que conversan se pudieron haber mostrado o representado de otra manera para agregar dinamismo y cuando se muestra de corrido se resienten los puntos débiles de su ejecución.
Attack on Titan ha sido un anime que ha desafiado convenciones narrativas y ha logrado un tono único entre el existencialismo y el estoicismo. Su final no podía ser una resolución unánime y feliz para todos, aún cuando algunos detalles y subtramas se quedan a medias, muchos disfrutamos del realismo con el que Isayama planteó la conclusión de su historia. Los créditos son brutales y, al mismo tiempo, hay algo especial en la escena postcréditos, “una curita para el alma” leí en redes. Al final, se trata de la serie que nos mostró que la vida puede ser cruel, pero merece ser vivida.

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