La más reciente publicación de Malpica rebosa de humor y ocurrencias
La literatura, el cine y la televisión han especulado en más de una ocasión sobre lo que ocurriría si hiciéramos contacto con la vida extraterrestre. Antonio Malpica no se queda atrás y en el marco de la Feria Internacional del Libro presentó Invasión Extraterrestre una historia para niños con un ligero giro que cambia el destino de los feroces alienígenas que desean invadir la Tierra.
En palabras del escritor “vienen muchos extraterrestres, 3500 soldados en una nave dispuestos a conquistar el planeta, pero son víctimas de un error de cálculo del tamaño real de los seres humanos y cuando llegan se dan cuenta de que o ellos son muy pequeñitos o los seres humanos son colosales”. Malpica comenta “la idea es encantar a los chavitos con una historia eminentemente divertida, yo creo que ahí es en donde puse más la nota de mi narrativa en esta ocasión”.
Así, la invasión resulta en un rotundo fracaso por una serie de coincidencia que dejan a un único superviviente, un alienígena con el nombre más terrorífico jamás inventado, quien junto a René, el niño que vive en la casa donde la nave aterrizó, protagonizarán esta peculiar historia.
Respecto al humor de la historia, Malpica comenta “ocurren cosas al interior del libro que tienen que ver más con dramas internos, René está pasando por una crisis personal y ahí es en donde entra la participación del extraterrestre, porque lo trata de ayudar, pero siempre es buscando el tono de la comedia, no es tan difícil cuando tratas justamente de ridiculizar, sacar la parte alegre, luminosa de prácticamente cualquier evento”.
El libro cuenta con las ilustraciones de Javier Betteo, quien refuerza el espíritu de la historia con ellas “quedé maravillado desde el principio, la mano de Beteo es impresionantemente buena, quedó que ni mandado a hacer… no tengo nada que objetar, si no mucho que agradecer porque todo lo que hizo es impresionantemente bueno, el trazo, los textos, la caracterización de los personajes y, por supuesto, el color”.
El trabajo de Malpica ha atravesado por diversos géneros, incluyendo claro la ciencia ficción, por lo que comenta al respecto “a mí me gustan mucho las historias en donde ocurren cosas que no suelen pasar en la cotidianidad, porque te dan mucha libertad de movimiento y creo que luego como lectores nosotros agradecemos cuando ocurren en los libros cosas que no pueden ocurrir en la realidad, porque eso expande tu mente y te da permiso de soñar con otras cosas”.
El escritor confiesa que no tiene empacho en tratar cualquier tema en cualquier tono “cuando me pongo a escribir, trato de no atormentarme mucho con la idea de que lo que tengo que producir tiene que ser ni muy revolucionario, ni muy trascendental, ni a lo mejor demasiado propositivo, si no simplemente contar una historia que yo creo que puede ser interesante, entretener a los chicos y a los grandes, la verdad es que siendo así puedo fluir bastante bien”.
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