Una historia donde el pasado y el presente se entretejen para mostrarnos cómo podemos volver a sentirnos completos cuando hemos perdido lo que creíamos más importante.
En “El significado de perderte” de Jaye Robin Brown nos encontramos con Jess, quien desde que murió su padre, está muy enojada con el mundo, pero cuando conoce a Vivi todo cambia, pues ella la ayuda a lidiar con el dolor y la furia a través del arte, la gran pasión de Jess. Ambas se enamoran y de pronto el futuro parece un lienzo en blanco lleno de posibilidades.
Sin embargo Vivi muere de manera inesperada y ese futuro que parecía perfecto se desvanece. Jess aleja a todos los que la rodean y deja en el pasado esos planes que imaginó con la ayuda de su novia. Justo cuando está a punto de tocar fondo conoce a alguien que la ayuda a canalizar su enojo, su pasión y su creatividad.
El dolor de la protagonista se agudiza precisamente por el recuerdo de padre, quien murió en Afganistán cuando ella era joven, por ello esta reciente pérdida le devuelve sentimientos de ira e impotencia, a las que lidia con peleas, especialmente con sus compañeros en la escuela que la acosan por ser gay. Esto la lleva a una escuela alternativa cuyas materias incluyen herrería, en lo cual se desenvuelve de manera natural, porque martillar metal caliente le ayuda a sacar la ira, despierta sus impulsos artísticos y le da el ímpetu para postularse a la universidad. Pronto un grupo de duelo comienza a ayudar a Jess a encontrar su camino, no por dolor, sino de regresar a la vida.
Este es un libro trágico sobre un amor perdido, pero muestra también cómo el personaje está aprendiendo a sobrellevarlo, incluso si no hay forma de "superarlo". Advertimos que cualquiera que lo lea definitivamente debería tener algunos pañuelos cerca, porque, como es de esperarse, es terriblemente triste.
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